Jesús Ofrece el Pan que Alimenta

Muchísima gente se acercaba a Jesús para escuchar sus palabras. Jesús sentía compasión de ellos y les enseñaba con cariño durante todo el día. Al atardecer los discípulos se acercaron para hablar-le.
La Palabra de Dios nos enseña: “…El lugar es despoblado y se hace tarde. Despídelos para que vayan a las eldeas y a los pueblos más cercanos y compren algo de comer”(Mc 6,36)

Los discípulos pensaron “Cómo podremos alimentar a toda esa gen-te?” Jesús, que quería enseñarles a atender las necesidades de la gente, los invita a dar una respuesta.
La Palabra de Dios nos enseña:
“…Denles ustedes de comer…”(Mc 6,37)

 Jesús recibe los alimentos, cinco panes y dos pescados, que tenían los discípulos. Y les pide que organicen a la multitud, sentándose en grupos sobre el pasto del lugar.
La Palabra de Dios nos enseña:
“…Ustedes tienen panes, Cuántos? Una vez averiguado, le dijeron: Son cinco panes y además hay dos pescados…”(Mc 6,38)

Jesús tomó los panes y los pescados y con sencillez oró al Padre, que siempre lo acompañaba. Jesús confía en el Padre Bueno que quiere una vida digna pa-ra todas las personas.
La Palabra de Dios nos enseña:
“…levantando los ojos al cielo, pronunció la bendición, partió los panes y los iba distribuyendo a los discípulos para que los repartieran…” (Mc 6,41)

Los discípulos distribuyeron los panes y pescados y toda la multitud comió hasta saciarse. Eran muchísi-mas personas, hombres, mujeres y niños. También sobraron canastas llenas con panes y pescados.
La Palabra de Dios nos enseña: “…Comieron todos hasta saciarse…” (Mc 6,42)



Jesús-Eucaristía nos enseña a compartir lo que tenemos para que no haya hambre en nuestro mundo.